Tin Cañon es un BioHacker que ha querido sentir en sus piel lo que es ser un cyborg. Para ello se ha implantado el mismo en su propio antebrazo, sin anestesia ni ayuda medica un dispositivo llamado Circadia. Un chip sellado en una caja, alimentado por una batería de recarga inalámbrica, capaz de registrar y transmitir datos biométricos por Bluetooth a cualquier dispositivo equipado con Android.
El proyecto se ha concebido con la ayuda del equipo grindehouse wetware , la transformación en cyborg ha dado a Cañón acceso completo a los datos biométricos de su cuerpo en tiempo real. Tim Cañón ha querido imaginar un futuro de cyborgs, donde las personas tienen implantes electrónicos para el seguimiento de su bio-telemetría a través de una interfaz externa o smartphone.
Se diferencia de otras técnicas como el portátil pulsera FuelBand de Nike .
El dispositivo de fuente abierta da el control total del usuario de cómo se recopilan y utilizan datos. Por ahora incluyen lecturas de la temperatura del cuerpo, que se activan a través de Bluetooth y una conexión a Internet.
A mi personalmente solo la idea de implantar algo dentro de mi cuerpo me pone los pelos de punta.